Los lagos Lacar, Machónico, Hermoso, Falkner, Villarino, Escondido, Correntoso, Espejo Grande y Nahuel Huapi integran el circuito otorgándole un aditivo especial a la experiencia. Entre las diferentes tonalidades de los árboles, en algunos espacios cordilleranos, sobresalen los amarillos de las alamedas que a lo lejos evidencian la presencia humana en tanta inmensidad de vegetación autóctona.
Senderos de trekking y mountain bike atraviesan los bosques y permiten un contacto directo con el espectáculo otoñal. Diversidad de trayectos de variada dificultad culminan en miradores que regalan una panorámica deslumbrante y conmovedora. Los lagos Lolog, Nonthué, Meliquina también constituyen un verdadero deleite para el ojo humano.
Las excursiones lacustres brindan otra perspectiva del paisaje. Lagos extensos de aguas gélidas y azules profundos contrastan con la vegetación y realzan esta verdadera obra de arte natural. Los Lagos Lácar y Nahuel Huapi permiten vivir esta experiencia.